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Riesgos para la salud y seguridad de los niños en los videojuegos en línea 🎮
Lo que todo padre debe saber
Aunque pueden ser entretenidos, los videojuegos y los juegos en línea a menudo alejan a los niños de interacciones sociales esenciales y actividades físicas cruciales para su desarrollo. Es fundamental que los padres comprendan los riesgos potenciales y gestionen el tiempo de juego de sus hijos para fomentar una crianza saludable y equilibrada.
¡Es divertido! – si tienes la edad adecuada, el juego es apropiado y no reemplaza actividades de la vida real.
Cómo afecta el gaming a la salud de los niños
Dependiendo de la edad del niño, los videojuegos pueden representar riesgos para la salud en mayor o menor medida. Los cinco principales riesgos para la salud relacionados con los videojuegos y los juegos en línea son:
1. Fatiga ocular y problemas de visión
Los expertos médicos recomiendan limitar el tiempo de pantalla, especialmente para niños pequeños. Para los menores de 5 años, el uso de pantallas debe ser mínimo, ya que puede afectar negativamente su desarrollo cognitivo y la salud visual. [”]
Los niños mayores también están en riesgo. La exposición prolongada a pantallas de teléfonos y tabletas a corta distancia puede causar fatiga ocular y otros problemas de visión. [”]
Si van a jugar, es preferible que usen computadoras o televisores, ya que una mayor distancia de visualización ayuda a reducir la fatiga ocular. Es igualmente importante tomar descansos regulares. [”]
(Esto es tan importante para niños como para adultos. Después de cada 20 minutos de uso de pantalla, se recomienda descansar la vista mirando un objeto distante durante al menos 20 segundos.) [”]
2. Estilo de vida sedentario y aumento de peso
El pasar un tiempo excesivo jugando videojuegos puede hacer que los niños lleven un estilo de vida sedentario, reemplazando el juego activo, los deportes y el ejercicio. La falta de actividad física puede contribuir a un aumento de peso y a problemas de salud. Pasar muchas horas jugando suele reemplazar actividades físicas como deportes, juego en exteriores, y ejercicio, todos vitales para tener un peso saludable.
Los padres deben asegurarse de que el movimiento diario y la actividad física, junto con una alimentación equilibrada, sean una prioridad antes de permitir que sus hijos pasen tiempo frente a pantallas. Así promueven el bienestar de sus hijos en el corto y largo plazo.
3. Alteraciones del sueño
Jugar videojuegos, especialmente antes de dormir, puede afectar el ritmo del sueño, reduciendo su calidad y duración. Esto puede provocar fatiga y dificultades para concentrarse durante el día.
4. Problemas de salud mental
El uso excesivo de videojuegos se ha asociado con ansiedad, depresión y aislamiento social, especialmente cuando el gaming reemplaza las interacciones sociales y el juego al aire libre. En casos extremos, los niños pueden desarrollar una adicción, priorizando los videojuegos sobre actividades esenciales como la escuela, la higiene personal y las relaciones familiares.
5. Exposición a contenido inapropiado
Los niños que juegan en línea pueden estar expuestos a contenido inapropiado, ciberacoso o interacciones con extraños, lo que puede generar angustia emocional o incluso riesgos para su seguridad.
El juego en la vida real puede ser caótico, pero vale la pena.
Los riesgos ocultos de los videojuegos en línea
Los juegos que permiten el contacto con extraños deben evitarse debido al riesgo de interacciones inapropiadas con adultos desconocidos. Cualquier juego donde un extraño pueda iniciar contacto con tu hijo/a es inherentemente peligroso.
Uno de los ejemplos más citados por los expertos en seguridad es Roblox, debido a su baja edad mínima recomendada.
Desafortunadamente, algunas personas con intenciones perjudiciales usan esta plataforma para dirigirse a niños pequeños, quienes a menudo no comprenden la importancia de protegerse, mientras que muchos padres desconocen los riesgos.
Desafortunadamente, algunas personas con intenciones perjudiciales usan esta plataforma para dirigirse a niños pequeños, quienes a menudo no comprenden la importancia de protegerse, mientras que muchos padres desconocen los riesgos.
El problema con estos juegos es que las clasificaciones por edad no abordan adecuadamente los peligros que presentan las interacciones en línea con desconocidos.
Juegos donde las clasificaciones de edad no protegen contra el peligro de interacciones con extraños
Tomemos Roblox como ejemplo: el juego tiene una clasificación E10+ (para mayores de 10 años) por la ESRB en América del Norte y PEGI 7 (para mayores de 7 años) en Europa. Sin embargo, no está claro por qué niños de 7 o incluso 10 años deberían jugar este juego. Además de los riesgos mencionados, el incentivo de gastar dinero dentro del juego puede promover valores poco deseables. (Más adelante exploraremos juegos apropiados para esta edad)
Si tu hijo/a juega a Roblox, es esencial respetar estrictamente los límites de edad, incluso para hermanos menores. Para niños menores de 13 años, se recomienda que jueguen solo bajo supervisión. Se deben usar controles parentales para limitar el chat, restringir las compras dentro del juego y controlar el acceso a ciertos contenidos.
Por qué los controles parentales pueden no ser suficientes
Muchos de estos juegos ofrecen controles parentales, y aunque siempre deben activarse en niños de la edad recomendada, hacerlo puede generar una falsa sensación de seguridad. Las actualizaciones de software pueden restablecer configuraciones y muchos niños con conocimientos tecnológicos han encontrado maneras de eludir estas restricciones.
Juegos que se deben evitar:
Juego | Clasificación ESRB | Clasificación PEGI |
|---|---|---|
| Roblox | E10+ | 7 |
| Fortnite | T (13+) | 12 |
| Minecraft | E10+ | 7 |
| Call of Duty (Warzone, etc.) | M (17+) | 18 |
| Apex Legends | T (13+) | 16 |
| Among Us | E10+ | 7 |
| GTA Online | M (17+) | 18 |
| League of Legends | T (13+) | 12 |
| PUBG | T (13+) | 16 |
| Rocket League | E (All) | 3 |
Si bien estas clasificaciones por edad orientan sobre la adecuación del contenido del juego, a menudo no reflejan los riesgos asociados con las interacciones en línea, como chatear con desconocidos. La participación de los padres y la activación de configuraciones de seguridad son esenciales, especialmente para los jugadores más jóvenes.
Lo que todo niño debe saber
El sistema PEGI recomienda hablar con los niños sobre seguridad en línea cuando comienzan a jugar. Además de las recomendaciones que se encuentran a continuación, deben saber que es fundamental nunca compartir su nombre real en internet.
- «¡El mal comportamiento, el lenguaje inapropiado o hacer trampa NO están bien! Puedes bloquear a otros jugadores para que no te contacten, denunciarlos al proveedor del juego o la plataforma, y contarle a tus padres.
- Diles a tus padres de inmediato si te encuentras con información que te haga sentir incómodo. Esto puede incluir imágenes, videos, mensajes de audio o texto.
- No compartas información personal como tu dirección, correo electrónico, número de teléfono, contraseñas o fotos, ni siquiera cosas simples como tu rutina diaria, el nombre de tu escuela o tus pasatiempos.
- Nunca aceptes reunirte con alguien que hayas conocido en línea sin antes consultarlo con tus padres.»
Elegir los juegos adecuados
No todos los videojuegos son iguales. Opciones educativas como Khan Academy Kids o Duolingo ABC combinan aprendizaje y diversión sin interacción en línea. Para los aficionados al fútbol, FIFA ayuda a comprender mejor las reglas y estrategias del juego.
Para un entretenimiento más ligero, juegos como Mario Kart fueron destacados en estudios como una actividad que mejoró el bienestar mental durante la pandemia en Japón. [”]
Algunos estudios sugieren que, más allá de entretener, los videojuegos pueden mejorar ciertas habilidades. Por ejemplo, cirujanos con experiencia en videojuegos de precisión parecen desempeñarse mejor en cirugías asistidas por robots, lo que da fé de cómo algunos juegos pueden mejorar la coordinación ojo-mano. [”]
La solución más sencilla
Al igual que con los dulces, las tabletas o la comida frita, cuanto más se pueda retrasar su introducción a los niños, mejor. [”] Una vez que un niño conoce los chocolates y los reconoce en la tienda, empiezan las discusiones. Los videojuegos pueden seguir un patrón similar.
Si decides introducirlos, hazlo de manera cuidadosa, con reglas claras desde el principio. Para los niños en edad preescolar, no hay una verdadera necesidad de juegos en línea. Si decides permitirlos cuando tu hijo/a empiece la escuela, establecer límites desde el inicio puede ser beneficioso. Restringir los juegos a un sólo día a la semana, ayuda a los niños a disfrutar de ellos sin que estos interfieran con su aprendizaje o reemplacen actividades µás valiosas.
También es importante establecer expectativas sobre la duración de los juegos. Antes de que tu hijo/a empiece a jugar, comunícale claramente cuánto durará la sesión de jugos.
Para evitar un colapso después de jugar, intenta establecer una alarma con tu hijo antes de que comience a jugar. Para los niños en edad escolar más pequeños, limitar las sesiones a 20 minutos puede ayudar a prevenir la sobrestimulación y las rabietas o el “resfriado de concentración” que muchos padres conocen muy bien.
Para evitar un colapso después de jugar, intenta establecer una alarma con tu hijo antes de que comience a jugar. Para los niños en edad escolar más pequeños, limitar las sesiones a 20 minutos puede ayudar a prevenir la sobrestimulación y las rabietas o el “resfriado de concentración” que muchos padres conocen muy bien.
Al seguir estas pautas, puedes ayudar a tu hijo a desarrollar una relación equilibrada con los videojuegos y otras responsabilidades.
Nunca es demasiado tarde
Si sientes que introdujiste los videojuegos demasiado temprano o que tu hijo/a pasa demasiado tiempo frente a la pantalla y la situación se ha salido de control, no pierdas la esperanza. Siempre es posible tomar medidas para recuperar el equilibrio.
Lee nuestra guía sobre cómo manejar la adicción a las pantallas en niños y adolescentes para conocer pasos prácticos que puedes tomar ahora mismo.
Ayudando a niños con dificultades sociales o acoso escolar
Para algunos niños que tienen dificultades para hacer amigos o enfrentan acoso escolar, los videojuegos pueden proporcionar un refugio temporal. Sin embargo, esto puede dificultar que los padres establezcan límites en el tiempo de pantalla.
Aunque el juego puede ofrecer un escape temporal, es importante asegurarse de que los niños también tengan experiencias en el mundo real para desarrollar las habilidades sociales que necesitarán en la vida.
Animar a tu hijo a explorar pasatiempos o actividades fuera de la escuela puede crear un entorno seguro donde conocer nuevas personas y formar amistades en un contexto diferente. Saber que pueden establecer conexiones fuera de la pantalla puede aumentar su confianza y brindarles esperanza para interacciones sociales más saludables.
Únete a otros padres
Ponerse de acuerdo con otros padres sobre qué juegos son aceptables puede ser muy útil. Discutir estos temas en reuniones escolares puede ayudar a establecer normas comunitarias que beneficien a todos los niños.
Existen varias organizaciones y grupos que ofrecen apoyo a padres que quieren limitar el tiempo de pantallas y gestionar lo hábitos de juego en sus hijos. A continuación encuentras algunos enlaces que pueden ser útiles:
- Child Mind Institute: childmind.org – ofrece consejos de expertos sobre cómo gestionar el tiempo de pantallas y el impacto de la tecnología en la salud mental de los niños.
- Wait Until 8th: waituntil8th.org – Un movimiento que motiva a los padres a esperar hasta que sus hijos estén en octavo grado para darles un teléfono inteligente.
- Screen Time Action Network: screentimenetwork.org – Una colaición global que ofrece recursos y apoyo para padres preocupados por el tiempo que sus hijos pasan frente a las pantallas.
Conclusión para los padres
Prioriza las actividades físicas y sociales: anima a tu hijo/a a participar en juegos físicos, deportes y socializar con sus compañeros en entornos del mundo real para fomentar un estilo de vida equilibrado.
Limita y supervisa el tiempo de pantalla: si vas a permitirles que jueguen, asegúrate que las sesiones sean cortas y estructuradas. Usa pantallas más grandes para reducir la fatiga visual y asegúrate de que los juegos sean apropiados para su edad y educativos.
Fomenta intereses diversos: promueve una variedad de pasatiempos y actividades que impliquen interacción cara a cara, ayudando a reducir la dependencia del entretenimiento digital.
Comunica y colabora: coordina con otros padres para establecer pautas compartidas sobre videojuegos y medios digitales, creando un entorno comunitario saludable para el desarrollo de tu hijo.
Al centrarse en estas estrategias, los padres pueden ayudar a sus hijos a mantener una vida equilibrada, enriquecida por experiencias reales que fortalezcan sus habilidades sociales y su bienestar general.
